lunes, 30 de septiembre de 2013

Pedro Narvaiz

El 15 de septiembre último le mandé un correo electrónico que nunca me responderá. Le avisaba de la salida del libro sobre la historia de la revista Humor para el que habíamos intercambiado otros correos electrónicos. Hoy me entero y confirmo en los avisos funebres del diario La Nación que falleció el sábado el ex juez Pedro Narvaiz, protagonista de una de las tantas anécdotas que tuvo la revista pero que es especial porque está vinculada al secuestro del número 97. Casualmente, el domingo salió en Tiempo Argentino un fragmento del capítulo 7 donde están los detalles de esa historia. Puede leerse aquí.

domingo, 29 de septiembre de 2013

Mala Prensa

El gran programa de radio Mala Prensa (domingo de 17 a 18 por Radio América AM 1190) que conducen Juan Pablo Mansilla, Juan Ignacio Agosto, y Alexis Moyano dedicó hoy el programa a hablar de la revista Humor. Ahí estuve para aportar lo mio surgido del libro. Aquí los audios.

martes, 24 de septiembre de 2013

Seamos libres que los mercados no importan nada

Sabido es que ejemplares viejos de la revista Humor, de otros títulos de Ediciones de La Urraca u cualquier publicación periodística argentina de los últimos 50 o 60 años son posibles de conseguir en plazas porteñas específicas, algunas librerías tradicionales de Corrientes o Avenida de Mayo y también, claro, en sitios de subasta de Internet.
Allí es posible verificar cómo algunos piolas se hacen el agosto con la venta de estos objetos a valor de piezas de colección. Es imposible saber si alguien los compra, pero se supone que sí.
Hay por unidad o por lote. De la revista Humor hay varios ejemplares que merecen valuarse más que los 10 o 15 pesos de cotización que tiene cualquiera en los puestos de Parque Rivadavia o Centenario.
En ese sentido podría mencionarse cuatro: el número 1, el 97 (secuestrado), el 221 (décimo aniversario) o el 566 (último publicado).
Pero del primer número y del último no existen ofertas actuales. Del 97 había tres cotizaciones posibles, 23, 28 y 50 pesos y del aniversario 30, 39 y 139.

lunes, 23 de septiembre de 2013

No se sabe

Hoy me entrevistaron en el programa No se sabe de la FM de Radio Universidad (lunes a viernes 10 a 13). Aquí el audio de la nota http://is.gd/3Q1atK

viernes, 20 de septiembre de 2013

Biblioteca

El sitio Diario sobre Diarios da cuenta de la publicación del libro de Humor de Editorial Marea en esta nota de la sección Zona Dura.
Allí aparecen mencionados los libros antecesores a mi trabajo y también algunas de las muchas tesis universitarias sobre la revista que, en su mayoría, están enfocadas en los cinco años que la revista se editó bajo la represión dictatorial.
También en la web, el amigo y colega Samurai, Jack, hizo este comentario en su histórico blog; el colega Leandro Zanoni una nota para su eBlog y desde La Pampa esta mini entrevista.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Lanzamiento

El libro sobre la revista Humor comenzará a distribuirse en los próximos días. Una sinopsis y un capítulo para bajar en esta URL http://is.gd/jwOyxL

domingo, 15 de septiembre de 2013

Publicitarios

Muchos humoristas, dibujantes y hombres del periodismo vinculados con la revista Humor en particular y los medios de comunicación argentinos en general, se formaron o trabajaron en publicidad en algún momento de las trayectorias personales. Esto es porque en los años 60 los avisos de gráfica se hacían a mano, por lo que los artistas del plumín eran muy requeridos en las agencias.
Andrés Cascioli tuvo sus inicios en la historieta, pero hacia principios de los años 60 comenzó a trabajar en agencias de las que es muy difícil encontrar rastros: Publicidad Internacional Limitada y Aldaba. En la primera fue donde conoció y compartió espacio con Tomás Sanz. A finales de esa década, Cascioli se sumaría a la agencia de Oskar Blotta desde la cual salió en 1972 la revisita Satiricón.
"Éramos un grupo de publicitarios que queríamos una revista que se vendiera. Podíamos dibujar, descubrir dibujantes, hacer un periodismo que acá no existía y sí en el exterior, en algunas revistas universitarias como National Lampoon. Nos interesaban revistas que habían aparecido en el mundo y eran diferentes, una mezcla de historieta, humor y periodismo, pero periodismo sarcástico. Intentamos algo así; como además éramos publicitarios, queríamos una revista de venta masiva, popular", explicaría muchos años después el propio Cascioli. El Tano volvió al palo cuando no pudo sacar revistas y a la hora de hacer Humor también empleó algunas técnicas de ese arte.
Pero no sólo ellos fueron de la publicidad a la comunicación de masas. Otros personajes vinculados a Humor y Ediciones de La Urraca hicieron el mismo recorrido: Carlos Abrevaya, Pablo Colazo, Alejandro Dolina, Roberto Fontanarrosa, Jorge Guinzburg, Miguel Gruskoin, Juan Carlos Caloi Loiseau, Juan Carlos Muñiz, Carlos Trillo y Carlos Ulanovsky, son algunos de ellos.

viernes, 13 de septiembre de 2013

10 Números

4 caricaturistas están relacionados con las tapas de Humor: Andrés Cascioli, primero; Sergio Izquierdo Brown, más tarde; Carlos Nine al regresa la democracia, y Luis Gaspardo, en los 90.
5 sedes tuvo la redacción de Humor: avenida de Mayo 1324, primer piso, oficina 227 (domicilio de Cielosur); Piedras 482; Salta 258; Venezuela 842 y Bolívar y Alsina.
6 era el readership o promedio de lector por número que tuvo en su mejor época (1982-1983) Humor.
68 páginas tenía el primer número de Humor aparecido el martes 6 de junio de 1978.
97 era el número secuestrado por los militares en enero de 1983 que, pese a esa edición, vendió más de 300 mil ejemplares.
566 era el número de la última edición editada de Humor que llegó a los kioscos.
1000 pesos era el precio de tapa del primer número de Humor.
6000 ejemplares promedio vendía Humor dos años antes de que cierre.
25 000 ejemplares fue la primera tirada de Humor, de los cuales vendió alrededor de 22 mil. Dos años después esa cifra se duplicó, pero la frecuencia ya no era mensual sino quincenal.
1.000.000 de dólares llegó a valuarse el edificio de Venezuela 842, ex sede de la Escuela Panamericana de Arte y penúltima de Ediciones de la Urraca.

martes, 10 de septiembre de 2013

El rock argento y humor

La relación entre Humor y el rock argentino fue intensa de comienzo a fin. No sólo por las páginas de Gloria, donde desfilaron los protagonistas de gran parte de la prolífica movida musical de fines de los 70 y los 80, sino por algunos empleados de la revista de La Urraca.
En esa sección que se convirtió en una de las más emblemáticas sacaba fotos una chica de voz y condiciones musicales, Hilda María del Pilar Lizarazu, quien también aportaba imágenes a El Porteño -otra revista ícono de aquella época- y Mutantia, una publicación no menos histórica a cargo de Miguel Grinberg.
Otro empleado que terminó en el rock fue uno de los cadetes, Gastón "Francés" Bernardou, hoy percusionista de Los Auténticos Decadentes.
Pero el punto más alto de la relación fue el festival que la revista organizó junto a los dueños de La Trastienda el 7, 8 y 9 de agosto de 1981 en el estadio Obras para contrarrestar la visita de Frank Sinatra al Luna Park, traído por Palito Ortega.
Al escenario subieron artistas que estaban prohibidos o eran desconocidos: Rubén Rada, Dino Saluzzi, Jaime Torres, Víctor Heredia, Luis Alberto Spinetta, Rodolfo Mederos, Manal, Facundo Cabral, Antonio Tarragó Ros, Litto Nebbia y Bernardo Baraj. También "un rosarino de jardinero y gorra", Juan Carlos Baglietto, junto a Fito Páez, Rubén Goldín y Silvina Garré. Todos ellos comenzaban a tocar en Buenos Aires como la Trova Rosarina y tuvieron esa noche el debut en el llamado Templo del rock. El maestro de ceremonias fue un colaborador habitual de la revista, Miguel Angel Merellano.
Los shows tenían entradas muy populares y resultaron un éxito. Tanto que al día de hoy Ortega lo sigo usando como uno de los argumentos para el fracaso rotundo del concierto de Sinatra, además de la devaluación de la moneda argentina, claro. Ya en los 90, Cascioli consiguió la licencia de la revista Rolling Stone para editarla en la Argentina y puso al frente del proyecto a Guerrero y Fernando Sánchez, años después uno de los fundadores de la revista Barcelona.

viernes, 6 de septiembre de 2013

Portal

La noticia me llegó ayer por correo electrónico. "Falleció Ricardo Miguel Portal, uno de los fundaores de Humor" (sic), era el asunto. El texto del mensaje precisaba que el fallecimiento había sido el miércoles, a punto de cumplir 87 años; abundaba en describirlo como "editor prolifero y socio fundador" de Humor y Satiricón y que se había formado como editor con Dante Quinterno, creador de Patoruzú, con quien trabajó 27 años "hasta formar su propia editorial hacia fines de los '60".
La gacetilla también recordaba que El Huinca y Fabian Leyes, de Enrique Rapela, con algunas tapas ilustradas por Guillermo Roux (sí, el artista plástico), fueron las primeras publicaciones a las que se habían sumado Cuarta Dimensión, de Fabio Zerpa y "grandes historietas" como El conventillo de don Nicola de Torino, Las aventuras del capitán Piluso y La voz del rioba de los personajes televisivos de los hermanos Sofovich y Jaimito, entre otras.
Agregaba que en 1972 lo habían convocado los (hermanos) Blotta para fundar Editores Asociados, que público Satiricón, entre otros títulos. "Tras el cierre (clausura, en rigor) de la publicación, luego de unos años, como Presidente y Director Comercial fundó junto a Andrés Cascioli La Urraca, editorial que lanzó para junio del '78 Humor, "publicación que se convertiría, a partir de un humor brillante y critico, en una voz de resistencia durante la dictadura militar. "Sus restos descansan en el Jardín de Paz", finalizaba.
La primera vez que escuché el apellido de Portal venía con otro: Alpellani. Tarde en descubrir que no era como Thompson y Williams o López y Planes. Portal era Ricardo y Alpellani, Rubén.
Portal era el hombre de las finanzas y algunos lo conocían como el contador; Alpellani era odontólogo.
Nunca había escuchado de ellos pese a ser un conocedor medio de las publicaciones de La Urraca. Pero era por ignorancia. Ellos, en efecto, conocieron a Cascioli y los Blotta en los 70. Ambos tenían un sólido conocimiento de las imprentas y la industria gráfica, hasta entonces un terreno desconocido para los creadores de Satiricón.
En Editores Asociados, Portal era gerente administrativo y Alpellani, comercial. Pero además ambos tenían la editorial Cielosur, que en efecto ya tenía un amplio stock de publicaciones lanzadas.
Cuando la censura y clausura del gobierno de Estela Martínez de Perón cayó sobre Satiricón (1974), la sociedad Cascioli & Blotta se rompió y Portal & Alpellani quedaron del lado del Tano, con quien editaron primero Chaupinela (1975), también cerrada por la gestión justicialista; y la revista Rocksuperstar, en el primer año de la dictadura militar. Para Chaupinela fue que se creó Ediciones de la Urraca.
En 1978 llegaría Humor. El rol de Portal & Alpellani era aportar dinero para las publicaciones y administrar, no mucho más. Las cuestiones gráficas y editoriales eran siempre responsabilidad de Cascioli y el equipo que lideraba junto a Tomás Sanz. La sociedad se rompió en la década de los 80 por cuestiones nunca del todo claras, pero sin que terminaran en Tribunales. En la década del 90, Portal le "robó" algunas figuras a Humor para editar La Murga, una publicación de paso fugaz por los kioscos.
Intenté entrevistarlo el año pasado para el libro sobre la historia de la revista Humor pero me avisaron que estaba muy enfermo y anciano. Había visto su cara en alguna edición de Humor, pero recién al finalizar la investigación dí con la imagen que ilustra este posteo.
La agencia de noticias Télam publicó ayer un despacho, cuya fuente es Fernando, uno de los tres hijos de Portal. En los avisos fúnebres de hoy de La Nación lo recuerdan la esposa Filomena Eleonor Guido; sus hijos Ricardo, Silvina y Fernando, sus nieta Lucía y sus cuñados Nélida, Mirto y Humberto; un consorcio de propietarios de Palermo y Matilde Argüeso e hijos.
En esta imagen casera (gentileza de Nora Bonis, viuda de Cascioli), Portal es el primero desde la derecha en una sobremesa compartida por –de izquierda a derecha– Héctor Aure, Cascioli, Alpellani (parado), Carlos Rivas (sí, el director teatral) y Alejandro Vanelli (de anteojos detrás).